Atrás quedaron volantes con menos dirección asistida que un renault 4-l sin arrancar, atrás quedaron los volantes encima de la mesita de noche y los cojines haciendo de sillón improvisado, atrás quedaron los simuladores de coches sin cinturón. Ahora tenemos el simulador de formula 1 del futuro (en realidad es del presente pero queda mejor del futuro)
Aunque más que de formula uno parezca que estás disparando desde un Y-Wing, el invento es la caña. Y entran ganas de echar una, dos o 300 partiditas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario