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El delantero portugués Cristiano Ronaldo fue parado por la Guardia Civil española cuando se dirigía por la mañana a un entrenamiento el día antes de disputar la vuelta de los octavos de final de la 'Champions' ante el Olympique de Lyon. La causa fue el exceso de velocidad, según el 'Correio da Manha'.
El internacional luso, que suele conducir un Porsche Panamera negro llegó tarde ese martes al entreno debido al incidente. Según la publicación lusa, la Guardia Civil al ver que se trataba de Cristiano Ronaldo "hizo la vista gorda" y no le multaron, a pesar de ir a más velocidad de la permitida y de haber derribado unos conos que había sobre el asfalto.
"La enorme popularidad del jugador le ha librado de una multa, y tan sólo tuvo que fotografiarse con los agentes", dice el diario portugués.
Extraido de as.com